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Hola!!
Siguiendo la misma línea que la publicación de ayer, hoy nos preguntamos: ¿qué celebra la Iglesia Católica el Viernes Santo?
Vamos a efectuar la respuesta a esta pregunta a través de dos aspectos:
1) el relato de los acontecimientos de ese día, según los Evangelios y
2) los rituales (su significado) que realiza la Iglesia, todos los años, para esta fecha.
Por último, como acostumbramos desde ADFEDUCA, dejamos nuestro mensaje para compartirlo contigo… ¿Te parece que comencemos?
Los sucesos acontecidos el día viernes
Hoy se contempla a Jesús en su Pasión y camino al Calvario… Hoy la historia se extiende desde el Huerto de Getsemaní hasta su muerte…
Una vez que los soldados apresan a Jesús lo conducen a la casa de Caifás, donde recibe toda clase de burlas e insultos. Cuando llega el amanecer, y como Caifás no sabe qué hacer con él, lo conducen junto a Herodes quien constituye un Tribunal para tratar el caso. Ahí, en ese tribunal, se llega a la conclusión que Jesús está loco, lo visten de blanco (en señal de burla) y se desentienden de él. Entonces las autoridades, y quienes les apoyaban, decidieron llevar a Jesús ante Poncio Pilato (quinto prefecto de la provincia romana de Judea, entre los años 26 y 36 d.C.)
En principio, Pilato no vio culpa en Jesús para condenarlo, pero finalmente se avino a la presión de la multitud que clamaba por su crucifixión.
Según el Evangelio de Mateo, Pilato entonces se lavó las manos con agua a la vista del pueblo, proclamándose «inocente de la sangre de este justo«. (Este gesto de «lavarse las manos» es el origen de la expresión que llega hasta nuestros días).
Como era costumbre liberar a un reo por la fiesta judía de la Pascua, Pilato decidió soltar a uno muy conocido llamado Barrabás, cediendo así a la presión de los manifestantes.
Siguiendo el relato de los Evangelios, a Jesús lo despojaron de sus vestiduras, las cuales se echaron a suertes, le colocaron una corona de espinas en la cabeza, lo golpearon, lo escupieron y lo escarnecieron. Le hicieron cargar con su propia Cruz hasta un pequeño monte, a las afueras de Jerusalén, llamado Gólgota (lugar del calvario o de las calaveras, debido a la forma de calavera que tenían las rocas de una de sus laderas).
En el Gólgota o Calvario fue crucificado entre dos ladrones, bajo un cartel que decía “Jesús el Nazareno, Rey de los Judíos” (origen de las siglas y de la expresión INRI). Según el Evangelio de Juan, los pontífices de los judíos protestaron a Pilato, pidiéndole que cambiara la redacción por «él ha dicho: yo soy el Rey de los Judíos«. Pero Pilato se negó a formalizar el petitorio con esta famosa réplica: «Lo escrito, escrito está«.
Según el Evangelio de Lucas uno de los ladrones crucificados junto a Jesús le dijo: «Si tú eres el Cristo o Mesías, sálvate a ti mismo y a nosotros«. Pero el otro crucificado replicó: «¿Cómo, ni siquiera tú temes a Dios, estando como estás en el mismo suplicio? Nosotros, la verdad, lo estamos justamente, pues pagamos la pena merecida por nuestros delitos, pero Éste nada ha hecho«. Y dirigiéndose a Jesús, expresó: «Señor, acuérdate de mí cuando llegues a tu reino«. Jesús le contestó: «Te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraíso«. (Según un Evangelio apócrifo, este Buen Ladrón se llamaba Dimas. San Dimas es el primer santo del cristianismo y su festividad se celebra el 25 de marzo).
Los Evangelios de Mateo y Marcos narran que, antes de morir, Cristo exclamó con una «gran» voz: «ELI, ELI, LAMMA SABACTHANI«, que significa: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?«. Según San Lucas justo antes de expirar dijo: «Padre mío, en tus manos encomiendo mi espíritu«, en cambio San Juan comenta que expresó: «Todo está cumplido» y expiró.
En ese momento, según los Evangelios, sucedieron cosas extraordinarias. Mateo escribe: «Y al momento el velo del templo se rasgó en dos partes de arriba abajo, y la tierra tembló y se partieron las piedras. Y los sepulcros se abrieron, y los cuerpos de muchos santos, que habían muerto, resucitaron. Y saliendo de los sepulcros después de la resurrección de Jesús, vinieron a la ciudad santa y se aparecieron a muchos«. Mateo y Marcos, en cambio, recogen la expresión de un centurión romano que había asistido a la crucifixión: «Verdaderamente este hombre era Hijo de Dios«. Lucas la varía esta expresión ligeramente: «Verdaderamente este hombre era justo«. El sentimiento de los presentes era de asombro y de congoja. Según San Lucas volvieron dándose «golpes en el pecho».
Una vez que el cuerpo de Jesús fue descendido de la cruz, José de Arimatea, «persona ilustre y senador» (Marcos), se lo reclamó a Pilato, que accedió a entregárselo. José envolvió el cuerpo del Nazareno en una sábana y lo metió en un sepulcro abierto en una gran peña, sellando la entrada con una gran piedra. Cuando al amanecer del domingo fueron María Magdalena, María y Santiago para embalsamar el cuerpo, la piedra estaba apartada y el cuerpo había desaparecido.
De acuerdo con estos párrafos que has leído podemos dar una primera respuesta a la pregunta de partida diciendo: el Viernes Santo recuerda estos hechos (el día de la muerte de Jesucristo) que, según enseña la Iglesia Católica, entregó su cuerpo y derramó su sangre para el perdón de los pecados y para la salvación de muchos.
La Tradición de la Iglesia
Según una antiquísima tradición, la Iglesia no celebra los Sacramentos en este día ni el siguiente.
El altar debe estar desnudo por completo: sin cruz, sin candelabros, sin manteles.
Ayuno y abstinencia se incluyen como precepto a obedecer, como lo dice el Código de Derecho Canónico en los números 1251, 1252 y 1253. Los días de guardar ayuno y abstinencia son: el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo. Deben ayunar las personas que tienen entre 14 y 59 años.
El ornamento sacerdotal, para esta solemnidad, es de color rojo.
En primer lugar, se efectúa la Liturgia de la Palabra y la Oración Universal. Se lee la Pasión del Señor según el Evangelio de San Juan.
El segundo momento es la Adoración de la Cruz: el leño del Calvario no es sólo un suplicio, sino sobre todo la cruz exaltada. El celebrante, los ministros y los fieles van a postrarse sucesivamente delante del crucifijo en señal de adoración de Cristo, triunfante por la Cruz.
En tercer lugar, la Sagrada Comunión, que se distribuye únicamente a los fieles dentro de la celebración de la Pasión del Señor; a los enfermos, que no pueden participar en dicha celebración, se les puede llevar a cualquier hora del día.
En cuanto al Vía Crucis comentamos que es la devoción propagada, sobre todo por los franciscanos, a partir de los Siglos XV y XVI. Consiste en recorrer un itinerario de representaciones, llamadas Estaciones, que representan las etapas del camino que recorrió Jesús desde el palacio de Pilato al Calvario, deteniéndose a meditar y a rezar en cada una de las Estaciones. Otra devoción muy frecuente es el Sermón de las Siete Palabras.
Respecto de las Tradiciones Populares que comúnmente se efectúan este día, podemos mencionar: la Procesión del Silencio y la compañía de la Virgen vestida de luto. Existen muchas Tradiciones Populares según el lugar y la cultura. Tal vez la que ha tomado mucha fuerza es la representación en vivo del Vía Crucis. Sin embargo, estas tradiciones no sustituyen la liturgia del Día, pues es un mandamiento de la Iglesia.
En síntesis:
Políticamente, los sumos sacerdotes (autoridades religiosas de la época) conspiraban contra Jesús de Nazaret porque éste se proclamaba ser «el Hijo de Dios», lo consideraban un «alborotador»… A partir de ahí comienzan a desencadenarse los acontecimientos que ya conoces.
Desde el plano de la fe, el Viernes Santo es el segundo día del llamado Triduo Pascual: el período durante el cual la Liturgia Católica conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
Se recuerda la muerte en la cruz del fundador del Cristianismo. Según la tradición cristiana Jesucristo murió a los 33 años y a las 3 de la tarde.
En este día, la Iglesia celebra la gloriosa Pasión de Jesús, Su Muerte Victoriosa destacando, como símbolo de salvación, la Cruz del Señor.
Desde ADFEDUCA queremos finalizar este encuentro así: quedándonos en silencio, repasando todo ese viaje, todo ese camino de dolor… Reflexionando acerca de lo que significa “saber mirar la Pasión de Jesús”…
Ojala que todos y todas podamos aprender a transformar las cruces que llevamos en amor.
Que tengas un buen Viernes Santo: reflexivo, maduro y en paz. Equipo ADFEDUCA
Fuentes:
http://noticias.lainformacion.com/religion-y-credos/conoces-que-se-celebra-en-viernes-santo_LlqwbovTqgkmHSnsckO3Y6/
http://www.diocesisdecanarias.es/preguntarespuesta/fe-catolica/viernes-santo-que-celebramos-este-dia.html
