Estimados profesores y profesoras:
Desde ADFEDUCA, nos es muy grato saludarlos, saludarlas este 17 de setiembre, fecha en que celebramos vuestro día, nuestro día, en homenaje a José Manuel Estrada…
Hay una expresión de Unamuno que quisiéramos recordar hoy: “…Era tan hombre y tan maestro, y tan poco profesor -el que profesa algo-, que su pensamiento estaba en continua y constante marcha, mejor aún, conocimiento… y es que no escribía lo ya pensado, sino que pensaba escribiendo como pensaba hablando, pensaba viviendo, que era su vida pensar y sentir y hacer pensar y sentir”. …
”Era su vida pensar y sentir y hacer pensar y sentir”… Enseñar- nos, aprender con ellas, con ellos, nuestros alumnos, nuestras alumnas…
¡¡Qué importante esto!! Qué bueno es saber, entender, vivir, sentir que, en la tarea que desarrollamos todos los días,:
- podemos escoger y elegir libremente nuestras batallas (aquello que es realmente importante, prioritario o lo que no lo es)…
- raras veces nos quedamos detrás del escritorio, y raras veces nos sentamos (porque sabemos que el verdadero trabajo se hace «en las trincheras», y por eso recorremos el aula)…
- no tenemos miedo en pedir disculpas y admitir los errores (porque sabemos lo importante que es correr riesgos en el aula, porque entendemos que todos sabemos algo pero que no existe alguien que lo sepa todo)
- somos reflexivos: cuando las cosas no salen según lo previsto, nos tomamos un tiempo para reflexionar y considerar formas alternativas… para la próxima.
- somos excelentes conversadores/as. Podemos conseguir un aula llena de estudiantes debatiendo, con facilidad, reflexionando acerca de la realidad y proponiendo alternativas que nos ayuden a construir la sociedad que necesitamos.
- estamos en condiciones de justificar y explicar las decisiones que tomamos a nuestros compañeros de trabajo, a las familias y a los alumnos y alumnas. Nunca hacemos las cosas solamente porque «siempre se han hecho así»
- no nos preocupamos por lo «bien» que hacemos las cosas, por lo «duro que trabajamos»…, sino por vivir cada día la maravillosa experiencia del acto educativo: ese «acto de amor, y por tanto, de valor», como bien nos lo recuerda Freire…
- siempre estamos buscando diferentes alternativas, maneras, para mejorar la práctica docente; no nos impresionan las nuevas y resplandecientes herramientas, sino aquellas que realmente mejoran la enseñanza, el aprendizaje…, porque entendemos que “la educación no cambia al mundo: cambia a las personas que van a cambiar el mundo”
- estamos convencidos, convencidas que las utopías existen y que la Patria, la verdadera Patria es El Otro, La Otra.
- no nos rendimos nunca, somos obstinadamente docentes, porque creemos en la Escuela Pública, Inclusiva, Comunitaria, la Escuela de Todos y Todas, la escuela donde formamos ciudadanía, con justicia social, para dar a TODOS y TODAS igualdad de oportunidades, despertar sueños, cultivar la solidaridad, el encuentro, la esperanza… Una escuela por la liberación y la humanización…
Por todo esto que vamos logrando poquito a poco y por todo lo que nos falta pensar y sentir y hacer pensar y sentir, renovemos hoy la alegría de continuar caminando por el sendero de la docencia progresista, de seguir creyendo, trabajando, luchando, soñando…
¡¡Muy feliz día para todos y todas!!